Francisco Romero Lema

  Réplica a Menéndez Pidal

Ruiz, Rosendo [pseudónimo de Francisco Romero Lema] (1951): “Un galleguismo de Colón”, em: Faro de Vigo (Vigo), 19 de Junho de 1951.

Ruiz, Rosendo [pseudónimo de Francisco Romero Lema] (1953): “La lengua de Colón”, em: La Noche (Santiago de Compostela): série de artigos publicados nos dias 25, 28 e 30 de Abril e 2 de Maio de 1953.

Ruiz, Rosendo [pseudónimo de Francisco Romero Lema] (1959-1960): “Galleguismos de Colón”, em: La Noche (Santiago de Compostela): série de artigos publicados nos dias 28, 29 e 30 de Dezembro de 1959 e 1, 2 e 4 de Janeiro 1960.

Romero Lema, Francisco (1969): La lengua de Cristóbal Colón, A Corunha: Editorial Moret, 52 pp. [Recolhe os diversos artigos publicados na imprensa sob o pseudónimo de Rosendo Ruiz, com correcções e acrescentamentos, e introduz um novo capítulo intitulado “Algo más sobre Colón” (pp. 33-48) e um “Apéndice” (pp. 49-50)].

Fernando Pessoa

Fernando António Nogueira Pessoa (Lisboa, 13 de junio de 1888 — Lisboa, 30 de noviembre de 1935), más conocido como Fernando Pessoa, es uno de los mayores poetas y escritores de la lengua portuguesa y de la literatura europea. Tuvo una vida discreta, centrada en el periodismo, la publicidad, el comercio y, principalmente, la literatura, en la que se desdobló en varias personalidades conocidas como heterónimos. De día Pessoa se ganaba la vida como traductor. Por la noche escribía poesía. No escribía «su» propia poesía, sino la poesía de diversos autores ficticios, diferentes en voz, estilo y modos. Publicó bajo varios heterónimos (de los cuales los más importantes son Ricardo Reis, Alberto Caeiro, Álvaro de Campos y Bernardo Soares), e incluso publicó críticas contra sus propias obras firmadas por sus heterónimos. Habiendo vivido la mayor parte de su juventud en Sudáfrica, donde estudió durante su juventud, la lengua inglesa tuvo importancia en su vida, pues Pessoa traducía, trabajaba y pensaba en ese idioma. La figura enigmática en que se convirtió motiva gran parte de los estudios sobre su vida y su obra. Murió por problemas hepáticos a los 47 años en la misma ciudad en que naciera, dejando una descomunal obra inédita que todavía suscita análisis y controversias.

Poema «IRONIA», correspondiente al número VL del conjunto «MAR PORTUGUEZ» en la revista «Contemporanea», vol 2 nº 4, 1922:

Faz um a casa onde outro pon a pedra.

O gallego ColÓn, de Pontevedra,

Seguiu-nos para onde nós não fomos.

Não vimos da nossa arbore esses pomos.

Um imperio ganhou para Castella

Para si gloria merecida-aquella

De um grande longe aos mares conquistado.

Mas não ganhou o tel-o começado.

Fernando Alonso Conchouso

Artículo publicado en el Diario de Pontevedra el 10 de mayo de 2009

 

Fernando Colón hijo de Cristóbal Colón, nos dice en su libro «Historia del Almirante» que los corsarios gascones Guilleume Caseneuve-Collón y Juan Collón, conocidos como Colon el viejo y Colón el mozo, tío y sobrino respectivamente, eran sus parientes, y Washington Irving dice que navegó Colón con estos almirantes muchas veces y por largo tiempo. Estos corsarios eran temidos en todo el mediterráneo y tan terribles en sus hechos contra los infieles, que las madres moriscas asustaban a los ñuños con su nombre.

COLÓN, CORSARIO GALLEGO

Muchos otros colombistas nos dicen que Colón iba precisamente al mando de una nave en la flota del corsario Juan de Collón, cuando intentaron interceptar una flota veneciana entre Lisboa y el cabo de San Vicente.

Uno de estos almirantes al servicio de Francia lo encontramos durante las guerras antisabelinas, en las costas gallegas luchando mano a mano con nuestro Pedro Madruga, así lo testifican los reyes el 16 de Febrero de 1476:

(Bajo el mando de Colón estaba Juan de Granada, un marino experto de Rentería, quien ante las promesas de favores y recompensa por parte de los Reyes, deserta de la ilota al mando del Corsario e intenta su captura.) . . «por cuanto por nuestra parte vos fue mandado que, como bueno e leal subdito e natural nuestro, vos redujeses a nuestro servicio e ficiesesdes toda guerra e mal e dapno al dicho Colón, corsario, e le prendiesedes e tomasedes cualesquiera naos que toviese, las quales el había robado a nuestros subditos e naturales, e ficiesedes sobre ello todo vuestro poder, e vos, como bueno e leal e fidelidad que nos devedes, pusistes en obra, e trabajastes por prender al dicho Colón, e peleastes con sus gentes, e feristes e matastes mucha della en el puerto de La Coruña, e le tomastes dos naos que le pudistes aver, e prenderiades se podierades al dicho Colón».

Durante las guerras antisabelinas (1474-1476), la nobleza gallega se divide entre los partidarios de Isabel y su tía Juana (la belrraneja), casada con el Rey de Portugal, entre los partidarios de Juana se encuentra Pedro Álvarez de Sotomayor (Pedro Madruga) quien hasta ese momento mantenía un control férreo sobre las ciudades y señoríos gallegos, y a quien las gentes de Pontevedra lo aclaman como «o noso reí». Este omnipotente señor Feudal, hasta ese momento invencible por su astucia, versatilidad y pericia en la guerra tanto fuese por tierra como por marj y que además había cursado estudios eclesiásticos, (carta de Enrique IV donde lo propone como arzobispo de Santiago) se encontraba en el otoño de 1476 cercado por las tropas Isabelinas en la ciudad de Pontevedra, tan solo contaba con la ayuda del temido almirante y corsario Gascón Guilleume de Caseneuve-Collón, conocido en todo el mediterráneo por Colón el viejo, quien actuaba como Almirante del Rey de Francia, y por la alianza de este con el rey de Portugal, ahora ayudaba a Pedro Madruga. A este corsario la piratería le aporta cuantiosos bienes en recursos y naos, obtenidos en estos años de su estancia en las costas gallegas, principalmente por el acoso que impartía con frecuencia a marineros vascos y comerciantes genoveses, los primeros habían llegado a un acuerdo con el Almirante gascón, pero al poco tiempo vuelven a ser saqueados y extorsionados. Jurando venganza estos, participan con el rey Fernando en armar una importante flota al mando de Ladrón de Guevara, quien sabiendo la situación exacta del Corsario (Pontevedra), se dirigen a su captura, y ayuda en la rendición de Pontevedra. Pedro Madruga y el corsario francés consiguen resistir en Pontevedra, pero pierden la ciudad de Baiona, de gran importancia marítima para los reyes Católicos.

¿Que parentesco tenían entonces estos corsarios al servicio de Francia y Portugal, con Cristóbal Colón y los Colones pontevedreses? Durante su presencia en nuestras costas, al menos, tres años como mínimo, uno o ambos corsarios tuvieron que establecer residencia en alguna zona dominada por Pedro Madruga, su aliado. El apellido Colón encontrado en Pontevedra, no es común en Galicia y ciertamente no parece gallego, su otra acepción del apellido, el apellido original «Collón», si era un apellido común en Francia, incluso hoy en día.

Como sabrán los lectores, no somos pocos los que defendemos la galleguidad de Colón y que este y Pedro Madruga eran la misma persona, quien tenga dudas sobre el Colón gallego, debería leer el libro del Pontevedrés Rodrigo Cota, el del vigués Alfonso Philippot, o el de tantos otros; es por ello, que la presencia de este pariente de Colón en nuestras costas no deja de sorprendernos, y más si nos acercamos a la iglesia de Santa María de Pontevedra, donde aparece la siguiente inscripción: » Os do cerco de Joan Neto e Juan de Collón feceron esta Capilla» La españolización del apellido Collón, está documentada en los documentos encontrados por Don Antelo Carmelo Castiñeira por Don Celso García de la Riega y por el profesor Castro Sampedro, más tarde Alfonso Philippot encuentra más documentos en el monasterio de Poio, y estaremos de acuerdo, que por lo peyorativo del apellido en Galicia, no nos debería sorprender; de hecho la inscripción original fue alterada al ser limada una de las eles, seguramente por el motivo anterior. Nos invita a pensar por lo anteriormente expuesto, que el corsario y el benefactor de la iglesia de Santa María pudiesen ser la misma persona. Está documentado, también, que el hermano de Don Cristóbal, Don Bartolomé Colón, el adelantado, realizó un viaje a Pontevedra entre 1505 y 1506.

En los documentos de Pontevedra aportados por Don Celso, aparece un Colón el viejo y un Colón el mozo, ya los dos corsarios al servicio de Francia, se les conocía como Colón el viejo y Colón el mozo, respectivamente. Aparecen también defendido por varios autores, que los hijos del Colón el mozo pontevedrés, se llamaban Cristóbal, Bartolomé y Diego. Siempre resultó extraño como los Colón eran recibidos por nobles señores y reyes, siendo ellos hijos de un cardador de lanas, pero cuando Bartolomé Colón viaja a Francia y es recibido por Ana de Beaujeu, regente durante la minoría de edad de Carlos VIII, y ofrece el plan de Cristóbal, no lo hace como un cardador de lanas, si no, como capitán y natural de su reino, Bartolomé Colón estuvo residiendo en Francia hasta llegarle noticias de la proeza de su hermano. El debate de su nacionalidad debe centrarse en si Cristóbal Colón era más portugués que francés, o más gallego que portugués, pero tengan por cierto que ni italiano, ni catalán. A partir de 1483 se produce la increíble desaparición de Pedro Madruga, no se entiende como un hombre de la importancia y relevancia en los acontecimientos de la época, desaparezca sin dejar huellas, y no se conozca el lugar de su sepultura e incluso si tuvo alguna. Nos dice Vasco da Ponte que hay rumores de que el señor de So-tomayor muere en 1486, justo cuando realmente se tienen las primeras noticias de la existencia de un Cristóbal Colón entrando en Castilla para reunirse con los reyes.

Algo parecido ocurre con los Corsarios Collón, desde que Guilleume Caseneuve-Collón es encargado de llevar a Alfonso V de Portugal a tierras Francesas en el mediterráneo, para que este último solicite ayuda militar contra los isabelinos, no se vuelve a saber nada de él ni de su sobrino. Bartolomé Colón era por sus trabajos, reconocido como un gran cartógrafo, y fue recibido por los reyes más poderosos del momento, ¿como es posible que no sepamos nada de su existencia, antes de 1486?.

Yo mantengo la posibilidad de un cambio de identidad de estos tres personajes y no de uno solo, es decir, de Pedro Madruga, de Guillermo Collón y Juan Collón; por los colones del descubrimiento. De Cristóbal Colón se ha hablado y escrito mucho, pero se sabe de él y los suyos muy poco, todo está abierto y nada cerrado y si no se sabe casi nada, es por que se estuvo buscando en el sitio equivocado; en el panorama medieval gallego están las piezas del rompecabezas.

Abramos el debate aquí en Galicia, por que está claro qué fuera, interesa dejar las cosas tal como están. ¿Que pasaría si encontrásemos un acta de nacimiento?, yo creo que seguiríamos igual, esto es una lucha mediática, a nadie le interesa que sea gallego, aquellos que creyeron ser su paisano, y ahora tienen importantes dudas, recurren ahora a desprestigiarlo, saben que tarde o temprano nos haremos con el reconocimiento de su galleguidad. Primero fueron recurrieron a esto, los italianos, ahora empiezan los catalanes y tardará tiempo en que los portugueses harán lo mismo, es como aquello del perro del hortelano, no come ni deja comer. Busquemos el reconocimiento internacional, pero tampoco dejemos de lado la proeza del descubrimiento, que nos llegue con el esplendor que se merece y se merece Galicia.

Felipe Ruza

En 1906 era decano del Colegio de Abogados, y autor de varios trabajos de jurisprudencia, publicados entre 1899 y 1918.

El 3 de marzo de 1945 apareció en el semanario madrileño “El Español” un nuevo artículo de Felipe Ruza, titulado “Colón nació en Pontevedra”, lo cual despertó la indignación de cierto “ilustrado articulista” que, utilizando el mismo medio, replicó en 31 de marzo impugnando dicho testimonio. Pero nuestro paisano volvió a la carga:

“Yo creí sinceramente que desde que la Real Academia de la Historia declaró que no existían pruebas para afirmar que Colón había nacido en Génova (declaración hecha el 30 de Abril de 1926, y publicada en el Boletín de la propia Academia), nadie en España se atrevería a sostener aquella absurda tesis…Bien hace el ilustrado articulista a quien replico, en lamentarse de que no se estudie lo necesario para penetrar en las profundidades de la Historia, juzgando con pleno conocimiento del pro y del contra…En cuanto a lo que arguye mi contradictor respecto a la escritura notarial de 1796, sobre la venta de La Puntada, que publique en el mismo articulo, veo que no se atreve, claro esta, a negar su autenticidad porque debe saber que esos documentos tienen sus originales archivados en la cabeza del partido judicial, y cuando como ese, son traslativos del dominio, suelen estar reseñados en el Registro de la Propiedad.


Descargar Archivo Archivo:ElEspanol 1945.pdf

COLON NACIÓ EN PONTEVEDRA

UN DOCUMENTO SENSACIONAL 3 de marzo de 1945

Es necesario insistir y hacer opinión. Muchos libros y bien documentados se han publicado sobre la patria de Colón ; pero no todos los quu pueden adquirir y leer un periódico pueden asimisMo adquirir y leer un libro. Y la opinión se generaliza más rápidamente por la prensa periodística. Y cuando es sana y fundada, todo lo vence.

El 12 de octubre de 1943 me hizo e1 honor el periódico Faro de Vtgo de publicar un modesto artículo mío sobre el origen pontevedres de Colón. Pero no lo hizo del facsímil de un documento que al efecto le envié y que juzgo de trascendental importancia en esto asunto. Y -con la ayuda e Ínteres patriótico de mi querido amigo don Torcuata TJlloa, ¡inteligente y antiguo colaborador en la patria pontevedresa de Cotón, enviamos estas notas al semanario EL ESPAÑOL, y el lector podrá juzgar sobre ‘las claras demostraciones que de ese documento que transcribimos se (Sigue en la pág. 33.J)dos rubricados.

«Concuerda con -su original y de orden de (una palabra ininteligible) y a petición del D. Francisco Troitiño espido la presente en la Júrisdición de Trasde-za, a beimte días del mes de agostd. Año ‘di; mil ochocientos siete, lo que seguro firm.9 y rubrico. jiEíi testimonio de verdad Antonio de la Torre Diéguez.»

Sigue firma y rúbrica del escribano.

SÍ el duque de Veragua era un des-, cendiente de Colón, como no puede ne-,garse, y él dice que la Puntada de Por-Lüsamto, en Salvador de Poyo, ía’ heredó de sus padrtiá, es claro y evidente que las de Colón, del verdadero apellido de Colón, fueran propietarios en Poyo y, por consiguieníe, vecinos de Poyo, o al menos de Pontevedra, porque la «Puntada» está situada en una arrabal de -Pontevedra, a su lado Oeste, en la margen derecha’ de su ría, a menos de cien metros de distancia.

Este lugar ha sido siempre, y es actualmente, lugar dp marineros, que forma una parte del gremio poderoso de Mareantes de Pontevedra, a quien se de-bt lia construcción de nuestra hermosa iglesia de Santa María, en una de cuyas . capillas existe una inscripción, grabada en sus muros, que dice : «Esta capilla la hizo el Cerco de Colón, uno de Jos siete Cercos del referido gremio.»

La finca «Puntada de Portosanto» no pudo llegar al duque de Veragua por otros títulos que los de sucesión hered;- • taria de los de Colón, porque no existe vestigio -ni memoria de que en Poyo ni en Pontevedra haya tenido ese ducado casa solariega ni castillos ni rentas, y esa finca aislada, (con buena parte a monte y otra tierra de Jabor, représenla haber sido solamente de modestos labradores y marineros.

Aquí, en Pontevedra, en aua archivos municipales y particulares de cofradías, pleitos y aforamientos de fincas se cita •repetidas veces el apellido Colón. En 2 de noviembre de 1428, Teresa García constituyó un censo a favor de la cofradía de San Juan Bautista, de Poniéve-dra1, •en presencia- de los procuradores y cofrades Bartolomé de Colón, A. de Nova, y 3 de octubre de 1510, el abad de Poyo otorga una escritura en foro a favor de Juan de Colón y su mujer, Constanza de Colón.

Aquí, en Pontevedra, >según notSs publicadas por el catedrático de Santiago D. Ramón Sobrino Buhigas, obtenidas de documentos auténticos, existieron y fueron perfectamente conocidos por contemporáneos nuestros, hasta fines del siglo xix, individuos con los apellidos enlazados de Colón y Enríquez, que se decían y reconocían públicamente por descendientes del descubridor del Nuevo Mundo y poseían bienes procedentes del Mayorazgo de Colón. (Libro interesante de Rey Sánchez, pág. 254.)

El procurador D. Miguel de Vigo, mayor de noventa años, que aún trabaja por su oficio, venía a mí despacho de abogado hace más de medio siglo ; con frecuencia me decía que la finca de «La Puntada» y otras tierra que él poseía e»i el lugar inmediato de «Andurique» habían sido de los de Colón. Y otro anciano también, quizá -de más de noventa años, llamado Fraga de Portosanto, también afirmaba que «La Puntada» y una casa completamente arruinada a la entrada de¡ lugar de Portosanto habían pertenecido «al que descubrió las Indias».

El apellido Colón es el verdadero y legítimo del Almirante, y rio otro; pues buen cuidado ha tenido éste de prevenir que, si llegase a perderse o extinguirse la confianza y simpatías de los Reyes Católicos. El origen gallego de Colón no era lo más a propósito para inspirar esa simpatía y confianza, porque Galicia, en su mayor e importante parte, se había puesto del Jado de la Beltraneja en la guerra de sucesión que entonces se sostenía. Colón era de origen judío por línea materna, aunque ya judíos convertidos. En Pontevedra dominaron éstos en considerable población, casi’ en su’ mitad; como lo demuestra el barrio populoso de «La Moureira», el (¡Lampan ‘d’os xudeos.i • y la parroquia unida de Mourente. Y, además, es bien sabido que por una preocupación’ infundada» Jos gallegos necesitados que salían fuera de su tierra parí desempeñar oficios humildes y modestos solían ocultar su origen.

¿Quién les había de decir a aquel’.os desprceladores de Ja región gallega que, atidandu el tiempo, a fines del sigJo xvjll, y sobre todo en el xrx, restablecidas ?as comunicaciones con e] resto de E paña, habían de ser- Jos gallegas políticos eminentes, distinguidos literatos, jurisconsultos- y médicas insuperables {-dígalo Ja famosa Universidad de Santiago), y en el Ejército de Mar y Tierra soldados como los que ha calificado lord Wellington, y generales como ej que actualmente rige los destinos de ‘España, D. Francisco Franco Bahamonde, que Dios guarde? Pero volvamos a la patria de Colón.

Colón quiso hacerse natural de Genova cuando vio que en España corrían peligros sus intereses y hasta su personalidad. Pero hoy son tan claras y condlu-yentes las pruebas del origen de Colón pontevodrés, parte de las cuales indicamos aquí, que no es posible, racionalmente juzgando, sostener lo contrario, especialmente la copia de escritura cuya transcripción Hterail publicamos, la cual es como e! «hilo que busca el ovillo», y el ovillo constituye una partida de bautismo del Almirante.

Por honor de España y gloria de Galicia y Pontevedra, no debe quedar en la oscuridad, ni siquiera en la penumbra, este asunto, -como cierta inexplicable apatía parece querer dejarlo. Es necesario insistir hasta poder consagrar que Pontevedra, esta hermosa perJa, entre, tantos encantos de la Naturaleza escondida, es la verdadera cuna del insigne navegante que supo descubrir y conquistar para su patria el Nuevo Mundo, aunque de aquella grandeza soflámente nos quede Ja inextinguible raza y su estimable simpatía.

FELIPE RUZA

Federico Rico y Fraga

ABC EN NUEVA YORK. POR COLON GALLEGO Jueves de febrero de 1927 publicado en el diario A B C.

El estudioso catedrático español D. Federico Rico y Fraga, que tan brillantemente sobresale en la Falcultad de Letras del prestigioso College of the City, es un infatigable propagandista de la tesis que sostiene la nacionalidad española de Cristóbal Colón. No solo en su cátedra, en las de otras instituciones de enseñanza, en círculos y en Sociedades, en cuantas publicaciones colabora, el profesor Rico aprovecha toda oportunidad para mostrarse como uno de los más entusiastas mantenedores de los derechos de Pontevedra a que se la proclame, oficialmente, cuna de Colón.

Por supuesto, el profesor Rico, que domina la lengua inglesa con la misma galanura que la española, en lengua inglesa dio la mayoría de sus conferencias, llegando de este modo a lo más profundo del espíritu de cuantos norteamericanos tuvieran la fortuna de orile. Y a él se debió así la primera información pública, seria y documentada, que en los Estados Unidos se divulgó en defensa de la cada día más sólida teoría del galleguismo de Colón.

Ahora, y con motivo del concurso abierto por nuestro A B C, ha vuelto a presentarse en público el profesor Rico, eligiendo, para mayor solemnidad de su conferencia, el magno Canegie Hall, donde cómodamente caben más de 6.000 espectadores. Entre éstos encontrábanse muy pocos compatriotas: el cónsul general, D Rafael de Casares Gil (que en la noche anterior pronunciara un elocuentísimo discurso ante las 34 Sociedades hispanas, reunidas con el mayor altruismo para contribuir al sostenimiento de fondo de Caridades): la Junta directiva de la Casa de Galicia, el catedrático sevillano D. José martel, y el siempre hidalgo D. Juan O’Donnell y Díaz de Mendoza, primogénito del ministro de la Guerra, duque de Tetuán… No recuerdo a ningún otro.

La primera conferencia del profesor Rico versó acerca de la vida, en general, de Cristóbal Colón, especialmente desde su llegada de Portugal hasta 1492; sus viajes y descubrimientos, su muerte, su familia, y la historia de cómo se le dio la nacionalidad genovesa a Colón.

Dedicó la segunda parte a demostrar que Colón no pudo ser genovés, pues los documentos en que fundas los italianos la nacionalidad de Cristóforo Colombo no prueban que Cristóbal Colón hubiera nacido en Génova; los absurdos entre las fechas de los documentos del Colombo italiano y las fechas de la llegada del Colón gallego a Portugal y su retorno a España; la diferencia de edades en uno y en otro; el idioma de Colón; la negativa del hijo de que su padre hubiese nacido en Italia; el pleito d sucesión; la evidencia de que Cristóbal Colón nunca se llamó Cristófor colombo, ni éste fue navegante, ni, menos, descubridor de mundo alguno.

En la tercera parte explicó el por qué debe reconocerse oficialmente que Colón era español y nació en Galicia; como surgió la tesis de su nacimiento en Pontevedra; cómo los que la defendieron lucharon con toda clase de obstáculos; cómo se abrió paso la teoría y en qué se funda; los motivos que Colón tuvo para ocultar su verdadera nacionalidad; el dictamen de la Real Academia de la Historia; la labor del Comité pro Colón español en la habana, y, por último, la campaña españolísima de nuestro A B C y la oportunidad del concurso abierto ante todo el mundo… La conferencia del profesor Rico, luminosa y vibrante, mantuvo, y aún acrecentó, el interés del público en todo momento, siendo repetidas veces interrumpido el orador por los aplausos unánimes de sus oyentes, que respondían así, con su homenaje, al homenaje que aquél tributaba a España.

Fue una muy grata noche. Doblemente grata para el que esto escribe, porque no solo consagróse en honor a nuestra Patria augusta, tanto más querida cuanto más lejos de ella no vemos, sino porque, al mismo tiempo, era también el tributo, devoto y efusivo, al hombre grande, al periodista insigne, al patriota ejemplar que fundó y orienta este A B C, en el que pusimos los más puros amores, y al que debemos todo lo que somos …

Por Miguel de ZARRAGA Nueva York, Febrero de 1927

Ernesto Padín y Lorenzo

LA VIEJA CUESTIÓN DE LA NACIONALIDAD DE COLÓN

La Coruña 17. El académico correspondiente de la Real Academia Gallega D. Ernesto Padín, en una razonada proposición dirigida al docto Centro, renueva la siempre latente cuestión relativa a la nacionalidad de Cristóbal Colón, muchas veces discutida.

El Sr. Padín divide su proposición en dos partes. En la primera expone la tesis genovesa triunfante del resto de localidades italianas que se disputan la cuna del almirante sosteniendo la teoría con argumentación suficiente, de que el Cristóbal Colón descubridor. En la otra tesis y apoyándose en diversos libros de reconocida solvencia y, sobre todo, en documentos en los que aparece el apellido Colón, precisamente en Pontevedra, y recordando que la Real Academia de la Historia acordó el nombramiento de una Comisión que estudiara este asunto, propone que la Real Academia Gallega plantee el problema y lo resuelvan los eruditos que designe.

A B C – 18 de Febrero de 1948

Enrique Zas y Simo

 

Enrique Zás y Simó _(La Coruña, 1877 – La Habana, 1929). Miembro de la Real Academia gallega (1919), fue gran defensor en América de la tesis gallega del nacimiento de Colón. Autor de los libros: «HISTORIA DE CUBA», La Habana 1926. «GALICIA PATRIA DE COLÓN» (1923) Y «SI… ¡COLÓN ESPAÑOL!. la Habana 1924.

 

Autor de la Historia de Cuba en 15 Tomos, la más completa y extensa publicada hasta la fecha. Autor de varias monografías, biografías, de narraciones históricas, de comedias y de cuentos y de obras de sociología.

GALICIA PATRIA DE COLÓN 1923 en la Habana SI… ¡COLÓN ESPAÑOL! .- es una refutación al folleto ¿COLÓN ESPAÑOL? del académico de la historia D. Angel de Altolaguirre.